Algunos elementos singulares de la línea férrea de Jerez al Trocadero.
En la memoria colectiva de nuestra ciudad se guarda como uno de los logros más brillantes el haber contado con la primera concesión otorgada en España para la construcción de un “camino de hierro”. La iniciativa, promovida por José Díez Imbrechts en 1829, pretendía unir Jerez con el embarcadero de El Portal y facilitar así el transporte de vinos hacia
La obra supuso un revulsivo económico y comercial en el Jerez de mediados del siglo XIX al facilitar la salida de nuestros vinos hacia los puertos de la bahía de Cádiz, evitando así el costoso y accidentado transporte fluvial por el Guadalete. No es de extrañar por ello que este gran proyecto figure, junto al de la construcción del acueducto de Tempul para el abastecimiento de agua potable a la ciudad, como uno de los más relevantes de cuantos se acometieron en el pujante Jerez del XIX.
El lector interesado puede profundizar en los pormenores históricos y financieros de esta magna empresa en los trabajos de autores como Diego Caro Cancela (Rev. Páginas nº 5, 1990) o de Francisco Sánchez Martínez (Rev. De Historia de Jerez, nº 11-12), a quienes debemos los más completos y documentados estudios sobre la historia del ferrocarril en Jerez y su entorno. Nosotros vamos a ocuparnos de un aspecto mucho más modesto relacionado con algunos elementos “materiales” de esta obra, que formaban parte de ese “paisaje ferroviario” entre Jerez y El Puerto, tratando de rescatar las imágenes de los viaductos que se construyeron para la misma, y que lamentablemente han desaparecido en los últimos años.
Aquellos días de mayo de 1852
La puesta en marcha de las obras tuvo lugar el 24 de mayo de 1852. Un asunto de tanta trascendencia tenía que ser forzosamente reflejado en el periódico local, “El Guadalete” que al día siguiente recogía: “Ayer se abrieron los trabajos de la línea primera de ferrocarril que se emprende en las Andalucías (…) entre esta ciudad y el Trocadero, punto tan vecino a Cádiz y tan en su radio que puede decirse que alcanza su población. Verdaderamente esta línea es entre Cádiz y Jerez”. Su autor, Francisco García Pina, terminaba su artículo subrayando la importancia de la obra y “… la nueva época que se abre para esta provincia”.
Para conocer más en detalle algunos pormenores, nada mejor que asomarnos a la Revista de Obras Públicas que en 1853, en un artículo titulado “Ferro-carril de Jerez al Trocadero”, daba cuenta de la construcción de las obras de aquella primera línea férrea de Andalucía. En sus páginas podemos descubrir cómo era ese nuevo “paisaje ferroviario” que empezaba a perfilarse en nuestra ciudad y que, desde entonces forma ya parte de ella:
“Esta línea, que ha de ser la primera que en la hermosa Andalucía ha de hacer conocer el poder de las locomotoras, dando vida y animación á los pueblos que recorre, no tiene más estensión que
El artículo describe el estado de las obras de esta primera sección, entre Jerez y El Portal, que se encuentran ya muy avanzadas, informando lo siguiente:
“La estación de Jerez se ha colocado en la plaza llamada del Egido, que teniendo por avenidas parte de las principales calles de la población, contribuye además por su estensión á la colocación cómoda y espaciosa de los edificios necesarios para la buena explotación: en esta estación se hallan casi concluidos los que han de servir para descanso de los viajeros, la cochera de locomotoras, la cerca que la separa de la población con sus correspondientes entradas, andenes y porterías, los cargaderos de carruajes y de mercancías, talleres provisionales y toda la explanación. La colocación de estos edificios se ha dispuesto de modo que si para mayor comodidad del público se quieren tomar los viajeros en el centro de la población, puedan unirse las vías de entrada y salida con dicho centro”.
La antigua estación, construida entre diciembre de 1852 y septiembre de 1853 en un emplazamiento próximo al de la actual plaza de Madre de Dios, debió ser un imponente edificio para el Jerez de la época, tal como se refleja en las viejas fotografías y grabados que de ella se conservan. Esta zona de la ciudad, conocida como El Ejido, en las proximidades del barrio de Vallesequillo, sufriría transformaciones importantes y considerables desmontes para dejar paso a las trincheras del corredor ferroviario, tal como describe
La traza del ferrocarril
“Unidas todas las vías de la estación en frente de la población de Vallesequillo, sale la línea atravesando el cerro del Molino de Viento, en una estensión de un kilómetro con la pendiente 1/100 y dos curvas de 416 y
Para desplazar este importante volumen de materiales generado en el movimiento de tierras que fue preciso realizar, se utilizaron 16 “wagones” de
Este trozo de la línea atraviesa el camino que va a la famosa Cartuja de Jerez en un sitio en que la cota del desmonte es de
El mencionado viaducto es el que luego sería conocido como “Puente de Cádiz”, demolido hace casi una década con las obras del Proyecto de Integración del Ferrocarril en la ciudad. Las imágenes que traemos aquí fueron tomadas a mediados de los noventa del siglo pasado y nos presentan el puente de tres arcos, construido con sillares de arenisca calcárea de las canteras de
Camino de El Portal
recta hasta el camino que desde la carretera general conduce á la cartuja. En este punto se ha hecho un viaducto para el paso del ferro-carril, que se une á un terraplén de
El segundo de los viaductos de la obra es el que permitía el paso del camino que unía la carretera general de Madrid a Cádiz (a la altura de la actual Depuradora de Aguas Residuales de Jerez), con
En su completa descripción de la obras de explanación del ferrocarril hastra El Portal, que concluyeron el 20 de septiembre de 1853, la mencionada Revista de Obras Públicas señalaba que “…Concluido este terraplén, continúa otro de menor altura siendo la margen derecha del río Guadalete hasta el sitio llamado del Portal, en que aproximándose demasiado al río ha sido preciso variar un trozo de
Este tramo de la traza, oculto en la actualidad entre las balsas de
Para saber más:
- Caro Cancela, D. (1990): “El primer ferrocarri de Andalucía.
- Pérez
- Revista de Obras Públicas (1853): “Ferro-carril de Jerez al Trocadero”. Tomo I. p. 67-68.
- Sánchez González, R. (1986).: “Los inicios del Ferrocarril en El Puerto de Santa María. La formación de la línea Jerez-Puerto (1834-1850)”. Gades, 14, 45-64.
- Sánchez Martínez, F. (2005/2006): “Jerez, cuna del primer ferrocarril andaluz (1850-1861)”, en Historia de Jerez, Nº 11-12. Jerez, Ayuntamiento de Jerez/Diputación provincial de Cádiz. PP. 139-156
- Torrejón Chaves, J. (2006): “Cádiz y los orígenes del Ferrocarril en España”. Comunicación presentada alIV Congreso Historia Ferroviaria. Málaga, sept. 2006
2 comentarios:
Me gustan mucho vuestras entradas con fotos y material de época que sirven de inspiración para trasladarlo a la maqueta.
Un saludo
Excelente blog, los felicito y les envio cordiales saludos desde Argentina.
http://ferroamigos.blogspot.com/
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