Renfe inicia la actividad en la nueva base de mantenimientos de trenes de Jerez
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Visita a las instalaciones de Renfe en Jerez |
Renfe ha comenzado a trabajar ya en la nueva ‘Base de Mantenimiento’ ubicada en Jerez en las inmediaciones de la Ciudad del Transporte, donde se realizarán todas las labores de prevención y mantenimiento de los trenes de Cercanías de la provincia. La puesta en marcha de este nuevo centro de trabajo, cuya construcción y equipamiento ha requerido una inversión de 3,5 millones de euros, forma parte de la estrategia de modernización de Integria, la división industrial de Renfe.
En estas instalaciones, tal y como explicaron ayer el director general de Fabricación y Mantenimiento de Renfe, Avelino Castro y el gerente de Mantenimiento de la zona Sur, Patricio Martínez, se llevarán a cabo tareas de mantenimiento de primer nivel, es decir, de carácter preventivo y reparaciones básicas, en los trenes de Cercanías ‘Civia’ que operan en el llamado por Renfe ‘Núcleo de Cádiz’, o lo que es lo mismo todos los cercanías que se mueven entre Cádiz, Jerez y sus paradas intermedias.
Esta será la actividad inicial del taller, si bien las características del nuevo centro permitirán trabajar en un futuro en el mantenimiento de cualquiera de los trenes autopropulsados eléctricos que prestan servicio en la Bahía de Cádiz.
Un proyecto de integria
La base de Jerez forma parte de un ambicioso proyecto de modernización tecnológica emprendido por Renfe a través de su división industrial, Integria, cuyo objetivo es ser un referente en mantenimiento y fabricación de trenes, así como desarrollar proyectos de construcción, ampliación y adecuación de instalaciones y talleres. Dicha modernización viene exigida por el cambio tecnológico que supone la incorporación de la nueva flota de trenes para todas las áreas de la compañía ferroviaria.
Instalaciones
El nuevo centro está ubicado exactamente en la actual terminal de mercancías de Jerez y ocupa una superficie de 2.475 metros cuadrados. Las instalaciones se dividen en tres zonas, dos interiores y una exterior.
La zona interior cuenta con un cuerpo central que alberga dos vías electrificadas de 100 metros de longitud y un cuerpo lateral con una zona de trabajo para reparación de los bajos del tren, almacén para suministros y área de oficinas dividida en dos plantas, con sala de reuniones, comedor y vestuarios para los empleados.
En el exterior se ha construido una tercera vía electrificada de 110 metros para estacionamiento de trenes.
El centro cuenta, además, con equipamiento industrial de última generación: un puente grúa de 16 toneladas para montajes pesados, un sistema para extraer y reparar los bogies de las unidades (el conjunto formado por sus ruedas y el sistema de anclaje de las mismas en la estructura del tren que se llama bajabogies, y dos plataformas desplazables que permiten intervenir en los costados y techos de los trenes para la reparación de los sistemas eléctricos que van alojados en el techo.
El nuevo taller se ha proyectado de acuerdo a los criterios de sostenibilidad que requiere un centro industrial de su categoría y como explicó el gerente de mantenimiento de la zona Sur, Patricio Martínez, en el mismo se ha construido en la zona exterior un almacén para depositar los residuos industriales que son retirados periódicamente por una empresa externa para su correcta gestión.
Además, en uno de los laterales del talles, también en el exterior se ha ubicado una depuradora para el tratamiento de aguas residuales, que decanta, separa aguas negras y grises y aplica un tratamiento bactericida sobre las mismas.
Entre el equipamiento auxiliar destacan también los paneles solares que suministran de agua caliente sanitaria al taller.
Método de trabajo
Los trenes de Cercanías de Cádiz pasarán periódicamente por la nueva base para realizar las revisiones preceptivas de su plan de mantenimiento.
En este sentido, hay revisiones que son de carácter rutinario que suelen durar un día y otras de mayor envergadura en las que el tren puede estar hasta un mes.
Las unidades que deban pasar estas revisiones accederán al taller a través de una de las vías y antes de pasar al interior de la nave se realizan las pruebas funcionales programadas, como freno, tracción o cualquier otra, así como la evacuación de las aguas sanitarias.
Tras la realización de dichas pruebas, el tren se estacionará en el interior de la nave y se actuará sobre los elementos que sean precisos, como sus bajos, costados techos, pantógrafo, etc. De forma simultánea se intervendrá igualmente en los elementos del interiorismo y confort necesarios (iluminación, cristales, asientos, etc.).
Una vez finalizadas todas las actuaciones, el tren se estacionará en la segunda vía para ser recogido por un maquinista a la mañana siguiente e incorporarlo de nuevo al servicio habitual de Cercanías de Cádiz.
En su etapa inicial, la nueva Base de Mantenimiento de Jerez se encargará de la revisión y mantenimiento de un parque de siete trenes de Cercanías, todos ellos modelos ‘Civia’, cuyo mantenimiento se realizaba hasta ahora en las instalaciones de Renfe Integria en Sevilla.
De igual modo, está previsto que este nuevo centro asuma el mantenimiento ligero de los trenes Avant de la relación Cádiz-Jaén (trenes Media Distancia de la serie 121 que circulan por vía convencional y por la línea de alta velocidad entre Sevilla y Córdoba). Hasta ahora, el mantenimiento de estos trenes se realiza en las instalaciones de Renfe en Madrid.
La capacidad y recursos de la nueva Base también permitirían asumir en un momento las necesidades de mantenimiento del futuro tranvía Cádiz-Chiclana.
El nuevo centro de Renfe cuenta con una plantilla de mano de obra directa de 12 trabajadores que durante los últimos meses han recibido formación específica para las labores que van a desempeñar en las nuevas instalaciones.
En total se han impartido 1.368 horas de formación, repartidas en cursos generales y específicos del parque móvil en el que se va a trabajar (trenes Civia).
Al empleo directo que genera la puesta en servicio de la nueva Base de Mantenimiento de Jerez se suma la contribución del mismo al desarrollo industrial de su entorno a través de las redes profesionales que se establecen con proveedores, empresas del sector, negocios de la zona, etc.
Así, a los empleos directos habría que sumar los puestos de trabajo indirectos ligados a la actividad del taller, de forma que el empleo total de estas instalaciones alcanzaría inicialmente los 18 trabajadores, entre plantilla propia y mano de obra contratada.
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